Hoy en día, aunque nuestras visitas al dentista se han convertido en una norma y las pautas para gozar de una buena salud bucodental se practican como algo cotidiano, aún hay muchas creencias en torno a nuestra boca y dientes que tomamos por ciertas y no lo son.
Es el momento de arrojar luz sobre estos mitos:
1. Cuánto más duro sea el cepillo y más enérgico el cepillado mucho mejor:
Popularmente existe la idea de que un cepillado enérgico con un cepillo de cerdas duras es más eficaz a la hora de dejar nuestros dientes impolutos. Esto es un error puesto que lo que conseguimos con esa técnica es desgastar el esmalte y herir las encías.
2. Masticar un chicle después de comer limpia tus dientes y sustituye al cepillado:
El chicle, al provocar la secreción de saliva, puede ser una medida de emergencia para alguna ocasión en la que no tengamos cepillo a mano pero nunca se puede considerar un sustituto del cepillo, el hilo dental y el enjuague bucal.
3. Si te haces un implante corres el peligro de sufrir alergia o rechazarlo:
Los materiales con los que están hechos los implantes dentales hoy en día son biocompatibles, de modo que sufrir una alergia o rechazo es una posibilidad muy remota.
4. Los adultos tienen menos riesgo de padecer caries que los niños:
Es una creencia sin fundamento la de que los niños tengan más posibilidades de sufrir caries. La caries está relacionada con la alimentación, la limpieza bucal y la saliva (que nos protege), no con la edad.
5. Cuando te sangren las encías es mejor no cepillarlas:
Las encías sangran porque se sufre algún problema en ellas, Si esto sucede hay que acudir al dentista y consultarlo con él. Independientemente de esto hay que continuar con nuestros hábitos de limpieza diarios. Cuidado con los pacientes fumadores porque la nicotina NO PERMITE el sangrado de las encías y ese “testigo del cuerpo” se queda oculto avanzando a una posible enfermedad irreversible denominada periodontitis.
6. La sensibilidad dental es un signo de padecer caries:
Hay diferentes razones por las que podemos padecer de sensibilidad dental. La caries es una pero no la única. Ante los síntomas de sensibilidad dental acude a tu dentista y hazte una revisión.
7. La halitosis siempre se origina por problemas de estómago:
El mal aliento la mayor parte de las veces procede de alguna causa relacionada con la boca, por la baja salivación, una mala higiene o alguna enfermedad.
8. Las embarazadas tienen más posibilidades de tener problemas dentales:
Hay un dicho popular que dice que “cada hijo cuesta un diente”.
Si bien es verdad que las embarazadas tienen que prestar mucha atención a su dieta para que sea sana, equilibrada y variada y a su salud bucodental para evitar problemas, esta creencia no es cierta.
9. Perder dientes es un signo de envejecimiento:
Si cuidamos nuestra salud bucodental desde pequeños y acudimos al dentista con regularidad la pérdida de dientes no tiene por qué ser en principio un problema según vayamos cumpliendo años.
10. Los bebés no pueden tener caries:
Los dientes de leche pueden tener caries y las infecciones pueden provocar muchos otros problemas en los más pequeños de la casa.